Puede que no sepas que estas 4 afirmaciones perpetúan el estigma del aborto, pero lo hacen

El estigma del aborto es una colección de ideas dañinas y falsas sobre el aborto, las personas que abortan, y las personas que los brindan. Estas ideas provienen de activistas contra el aborto y son perpetuadas por los medios de comunicación, pero las personas que se consideran pro-aborto, que trabajan a favor del acceso al aborto, también pueden perpetuar el estigma del aborto, incluso si no tienen la intención de hacerlo. Aquí hay algunos ejemplos de declaraciones llenas de estigma del aborto, y cómo puedes detenerlo en seco.

"Solo las mujeres cis tienen abortos."

Es posible que no hayas dicho estas palabras exactas, pero es probable que lo hayas insinuado con la ausencia de palabras inclusivas. Necesitamos ser explícitos sobre el hecho de que el aborto es algo que se hacen muchas personas, no solo las mujeres, ya que no todas las que tienen útero se identifican como mujeres. Esto incluye personas transgénero y las que no conformen con el género, que son constantemente maltratadas en entornos médicos. Podemos hacerlo mejor, podemos erradicar la noción de que ciertas personas, y solo ciertas personas, buscan y obtienen abortos y, por lo tanto, la lucha por el acceso al aborto debe servir solo a esas personas. El acceso al aborto es para todxs. El estigma del aborto es lo que nos dice lo contrario.

"Nunca podría hacerme un aborto, pero está bien para otras personas."

Esta es una declaración tan extendida, y la razón por la que es tan tóxica es porque pensamos que la segunda parte niega la primera. El aborto está bien para "otras personas," pero no para ti. Puede que no pienses que alguna vez necesitarás abortar, pero eso es estadísticamente improbable, incluso si estás embarazada intencionalmente. ¿Quiénes son las "otras personas" para quienes el aborto está bien y por qué? Cuando dices esto, estás insinuando que el aborto, y que las personas que lo buscan son inmorales, pero tú mismo estás exento de eso porque nunca lo conseguirías.

"El aborto no debe usarse como método anticonceptivo."

En primer lugar, el aborto es literalmente un control reproductivo, ya que evita que ocurra el nacimiento. Por supuesto, cuando las personas dicen esto, están enfocando en personas que se han hecho múltiples abortos, y la declaración de que el aborto debe ser "seguro, legal y raro" también lo hace. Metodos anticonceptivos son imperfectos y pueden ser de difícil acceso, la coerción reproductiva y la agresión sexual existen, lo que hace que el embarazo no planificado sea un hecho de la vida. Según un estudio del Instituto Guttmacher, el 45% de las personas que informaron que se hicieron un aborto se hicieron más de uno, y no olvidemos que la mayoría de las personas que abortan ya son padres. Finalmente, nadie le debe a nadie una explicación de por qué se hizo un aborto, y sin importar por qué, deberían poder accederlo de manera segura, tantas veces como lo necesiten.

"Nadie quiere abortar.”

Los sentimientos sobre el aborto son tan diversos como las personas que se los hacen, y el movimiento contra el derecho a decidir, y las personas que son reticentes al aborto (y a la autonomía corporal) pero que detestan admitirlo, se apoyan mucho en la idea de que todas las personas que se hacen abortos están profundamente en conflicto al respecto y siempre lo lamenta. Aparte del hecho de que sentirse en conflicto por algo y arrepentirse son dos cosas diferentes, sabemos que, estadísticamente, las personas no se arrepienten de sus abortos. (Además, aunque lo hagan, no hace falta decir que eso no significa que el aborto deba ser ilegal). Perpetuar la noción de que el aborto siempre es una decisión difícil promueve el silencio en torno al aborto, porque las personas que abortan enfrentan reacciones violentas cuando no se vean y actúen como se espera que lo hagan, y se espera que las personas que abortan sean destruidas emocionalmente por ellos, por lo que si alguien está feliz, aliviadx o agradecidx después de su aborto, puede optar por permanecer en silencio. El resultado es que vemos solo una especie de historia del aborto, lo que lleva no solo a más estigma sobre quién aborta y cómo se siente, sino que comenzamos a creer que el aborto conduce a la depresión y otros problemas de salud mental. Este no es el caso, por supuesto. El hecho es que las personas que desean un aborto pero no lo pueden acceder tienen más probabilidades de experimentar problemas de salud mental que aquellas que sí pueden acceder el procedimiento.